"EL BUCHE DEL PELÍCANO" DE PEDRO DE TENA: REIVINDICACIÓN DE LA LIBERTAD

 

A la izqda., retrato de Pedro de Tena. En el centro, retrato de Gonzalo García-Pelayo. A la dcha., dibujo que recrea una escena de la película Dejen de prohibir que no alcanzo a desobedecer todo


Hoy, por primera vez en la todavía breve historia de La dimensión súbita, acogemos el trabajo de un colaborador externo a la publicación. Y no se trata de un colaborador cualquiera sino de uno de altura quien, además, nos ha brindado una aportación muy especial, muy personal y muy original. El colaborador de quien hablamos es Pedro de Tena, un periodista de raza que, durante varias décadas, ha sido azote de la corrupción de los gobiernos socialistas en Andalucía y que, en los últimos tiempos, también se ha revelado como un humanista de ancho espectro, analizando y diseccionando aspectos y figuras de gran amplitud y diversidad de toda la cultura hispánica. Ahora, nos muestra una tercera faceta como poeta, ofreciéndonos un conjunto de poemas inspirados en la película Dejen de prohibir que no alcanzo a desobedecer todo de Gonzalo García-Pelayo, película de la que tuve la oportunidad de hablar en un artículo en la revista Cine Arte Magazine, el cual apareció con posterioridad en mi libro Gonzalo García-Pelayo: Rodar viviendo, y de la que también hablamos en otro artículo reciente en La dimensión súbita con motivo de estar disponible online en la web cinepelayo.com. Disfruten de este torrente de versos, palabras e imágenes que está impregnado de un aire libérrimo que está parejo con el espíritu de la película en la cual se inspira. Esperamos que les guste.
 

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El buche del pelícano

de

Pedro de Tena







































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